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Edgar Osvaldo Padilla Macedo

Edgar Osvaldo Padilla Macedo Este hombre Mexicano y bohemio que sabe entrevistar al alma.

Ya es hora,
vuelvo del viaje y me doy la bienvenida en este verso,
traigo equipaje en mis manos, en mi mente y en el pecho,
no hubo parajes, llego maltrecho, pero estoy ya en mi lecho,
recogi de las profundidades la verdad, y saben, yo la invente,
estaba un poco empolvada de mentiras, pero la limpié,
traje para regar en mis campos bastos sueños de la tierra prometida,
un poco de oro que tome de las miradas sinceras y prohibidas,
una frasco con fragancias de ayeres que usare los domingos,
una botella de recuerdos tambien para compartir con los buenos amigos,
encontre una esmeralda, lamento no poder mostrarselas, la olvide en otros brazos,
entre a tantas minas, cavé tantas veces, rompi mil pedazos,
sali sin tesoros, me sentia derrotado y deseaba el suicidio,
pero al beber del manantial la vida misma... no se como decirlo,
cayo sobre mi una lluvia de fuerzas, una luz en mis ojos, y en mis manos riquezas,
me inundaron canciones, me envolvieron pasiones y sentir de ilusiones
se hizo leve mi carga, mas veloces mis pasos y mejor horizonte,
ni tan grande montaña, ni tan largo fue el tiempo, ni tan lento el galope,
y conquiste la cima, y subia y bajaba, y hasta a veces volaba,
y mi largo trayecto ya quedaba detras, y era amigo del viento, y era dueño del mar,
y quizas por un tiempo me olvide de pensar, olvide a mi familia y olvide de rezar,
pero grande es la vida que en mi ligero andar, fui notando el pasado, y el futuro llegar,
sin el fruto del hombre, sin raiz que sembrar, y senti la nostalgia, senti no pensar,
y hasta incluso añoranza por las que vi pasar,
fui cerrando la llave que servia de escape de mis grandes segundos,
fue llenandose el alma, fue ganando intereses la moneda del mundo,
y abraze mis verdades, y comi las manzanas, y bebí de mi vida,
y hoy estoy ante ustedes para darles la mezcla que se llama alegría,
tomen risas de aqui, lleven fuerzas alla, alimenten sus sueños, iluminen su andar,
estoy muerto al fracaso, resucite al ganar.

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